El té verde es un tipo de té Camellia sinensis que ha tenido una mínima oxidación durante su procesado. El té verde no es fermentado, a diferencia del té negro, ya que las hojas se recogen frescas y después de someterse a la torrefacción, se prensan, enrollan y se secan. El té verde supone entre una cuarta y una quinta parte del total de té producido mundialmente.

A modo de resumen, aquí tienes algunos de sus beneficios:

– Contiene antioxidantes muy beneficiosos para ayudar a combatir determinados tipos de cáncer y en la reducción de los efectos del
envejecimiento y de enfermedades degenerativas.
– Propende la disminución del colesterol LDL (“malo”) y aumento del HDL (“bueno”).
– Tiene una acción diurética, broncodilatadora y astringente (antidiarréica).
– Protección contra la arterioesclerosis, disminución del riesgo cardiovascular, y reduce la formación anormal de coágulos sanguíneos.
– Ayuda a la disminución de la grasa corporal, ideal para el tratamiento de la diabetes y obesidad.
– Disminuye los niveles de azúcar en sangre y tiene ligeros efectos antibióticos frente a ciertas bacterias como los estafilococos y algunos virus.
– Por sus propiedades bacterianas es adecuado para eliminar el mal aliento y proteger la boca contra las infecciones que producen inflamación de las encías o para tratar heridas en la boca.

Beneficios del te verde