El té negro es un tipo de té que es más oxidado que el oolong, el té verde y el blanco. Los cuatro tipos se hacen de las hojas del arbusto (o árbol pequeño) Camellia sinensis. El té negro es generalmente más fuerte en sabor que los tés menos oxidados. Se utilizan dos principales variedades de la especie – la variedad de hoja pequeña (C. sinensis subsp sinensis), que se utiliza para la mayoría de otros tipos de tés, y la hoja grande de la planta de Assam (C. sinensis subsp assamica), que tradicionalmente se utiliza principalmente para el té negro, aunque en los últimos años se han producido con ella variedades de tés verde y blanco.

Estos son algunos de los beneficios del té negro:

– Es antioxidante: al poseer una gran cantidad de polifenoles, el té negro tiene una gran capacidad para proteger al organismo contra los radicales libres. Estos, generalmente, son una de las principales causas a la hora de debilitar las defensas. Además, previene el envejecimiento y ayuda contra los problemas degenerativos del sistema cardiovascular.
– Es astringente: al tener una buena concentración de taninos, que son los que le otorgan un sabor amargo, es ideal su consumo para combatir la diarrea o la gastritis.
– Es diurético: el té negro colabora significativamente con la eliminación de líquidos del organismo.
– Es reconfortante y bajo en calorías: es muy bajo en calorías y que aporta una gran sensación de saciedad, lo que lo convierte en ideal para reemplazar otras bebidas que sí te aportan mayor cantidad de calorías.
– Es estimulante: posee sustancias activas que animan a despertar tanto cuerpo como mente, lo que lo hace ideal para el desayuno o para después de las comidas.

Té negro | Black Tea | Te negre