Hola. Ahora que estamos en verano, porqué no disfrutar de un buen té frio? Aquí tienes una receta súper sencilla a base de té negro, miel y limón.
Primero hacemos una infusión con unos 5 gramos de té negro, en nuestro caso Lapsang Souchong. Añadimos agua a unos 80 grados y hacemos una infusión de unos 3 minutos.
Una vez infusionado añadimos el té en una jarra, ayudándonos de un filtro para que quede bien limpia y evitar que tenga un sabor demasiado amargo al acumular hojas.
En este caso hemos añadido la infusión de dos teteras. Entonces añadimos el zumo de 1 limón y miel al gusto.
Dejamos reposar unos minutos y entonces removemos para que se integren bien todos los ingredientes. El truco de esta receta es hacerlo mientras todavía está caliente, así el sabor será mucho mejor.
Dejamos que repose unos minutos más y ya lo tenemos a punto para servirlo en un vaso con hielo.
El color final es un ambar claro, y el sabor buenísimo. El té negro le da personalidad, la miel un matiz denso y dulce y el limón potencia ambos sabores añadiendo un toque cítrico.
Y puedes dejarlo en la nevera para el día siguiente sin problema.
Esto es todo por hoy. Muchas gracias por tu atención y hasta pronto.